octubre 7, 2016
El Vaticano desde la mirada de un Papa.
Roma es, sin lugar a dudas, una de las ciudades más importantes del mundo; 100% digna de entrar a la lista de lugares que debes visitar. He estado en esta ciudad muchas veces, he paseado por diferentes partes del centro, he saboreado, he probado y he hecho muchas fotos de prácticamente todo. Y, por supuesto, el término “prácticamente todo” también incluye la Plaza de San Pedro, fotos desde la parte superior del domo de la Basílica de San Pedro, hechas en varias ocasiones. Pero esta fue la primera vez que vi la plaza desde este ángulo:
¡También fue la primera vez que vi a esta persona en vivo!
¡Nuestra oficina local (no tan local, ya que nuestra oficina italiana aun no ha abierto una delegación en la Ciudad del Vaticano) me consiguió una reunión con él!
https://www.instagram.com/p/BK6AsyGguNu/
Por desgracia, nuestra reunión fue muy breve (duró casi 30 segundos). Sin embargo, pudieron ser los 30 segundos más cargados de emoción de mi vida; y, ciertamente, 30 de los segundos más memorables de mi vida. En realidad fueron 30 segundos muy modestos (solo le estreché la mano e intercambiamos algunas palabras), pero ¡me las arreglé para darle un pequeño regalo!
El regalo fue un aparato mecánico aritmético de 100 años de antigüedad (un aritmómetro Odhner). La historia tras dicho dispositivo es muy interesante y, si te la perdiste, puedes encontrar un resumen de la misma, además de sus antepasados, aquí.
Después de la misa, el Papa Francisco se retiró, mientras que nosotros hicimos una genial excursión por el Vaticano.
“¡Genial! Nunca había hecho fotos de la Basílica con mi nueva cámara!”, pensé cuando empezamos nuestra excursión. Pero, después pensé “¿Y qué?”, pues en Internet hay muchísimas fotos que han hecho otros turistas.
Mientras esperábamos a nuestro guía para la excursión, nos cruzamos con esta extraña “ecuación” en la puerta. ¿Pueden descifrarla?
Los Jardines de la Ciudad del Vaticano son excepcionalmente preciosos y están impecablemente cuidados. Ya los había visto desde la Plaza de San Pedro, pero esta vez pude pasear por ellos. Fue todo un placer.
Nunca había visto la Basílica desde este ángulo; supongo que como la mayoría de la gente.
Palmeras y monumentos:
¡Nuestro guía nos contó que los jardines tienen cien fuentes! Esta es la más grande:
Este muro lleva en pie desde el siglo IX, como lo confirma Wikipedia.
El paseo por los jardines fue incluso mejor porque casi no había nadie. Una experiencia muy exclusiva :).
Por cierto, el papa anterior, Benedicto, todavía vive en el Vaticano (en el monasterio que puede verse en las fotos de la fuente).
A continuación: los Museos Vaticanos…
Al fin, ¡lo he conseguido! He querido venir en varias ocasiones, pero nunca se daba el caso: siempre estuvieron en la última posición de mi lista de atracciones y nunca loo visité, además de que cierran a las cuatro de tarde
Y ¿qué puedo decir? No puedo decir nada: ¡me quedé sin palabras! ¡Mejor miren las fotos!
Nuestro guía resultó ser muy… alegre. Nos llevó corriendo por todas las salas en más o menos una hora. Aunque yo tenía una cita un poco después. Pero ¡qué tipo! Incluso hacía que camináramos en sentido contrario. También usaba atajos, como los de IKEA, cosa que los demás visitantes envidiaban y a nosotros nos apenaba bastante. También nos dio un trato preferencial: “está prohibido tocar esta campana, pero ustedes pueden hacerlo, ¡conozco muy bien al guardia!” ¡Vaya!
Así que, como les dije, el guía era muy rápido para mi gusto. Pero, aun así, fue una experiencia increíble.
¡En estos mapas podrán ver que Sicilia está al revés! Al parecer, así se ve desde Roma (el centro del mundo, claro). 😀
¡Frescos! Por desgracia, no se puede hacer fotos en la Capilla Sixtina, así que tendrán que buscarlas por Internet. Pero, al mirar hacia el techo, sí, el techo que pintó Miguel Ángel, pensarás: ¡Dios mío!
En los museos, a diferencia de los jardines, hay muchísima gente. Demasiada. Pero Roma es así en general.
Por lo tanto, os recomiendo que vengáis en un mes “correcto”. Eso es entre noviembre y febrero. Venid también en el momento adecuado del día (después de la comida, como nos dijo nuestro guía veloz).
¡Es todo por hoy, amigos! Volveré dentro de 2 movimientos de aritmómetro…