UNIQUE COSMIQUE OPTIQUE

La semana pasada los dejé con las instrucciones de seguridad para cuando visitaran la planta de cristales ópticos de Lytkarino. Ahora que todos tenemos claro cómo permanecer a salvo, continuaremos con nuestra excursión, en esta entrega continuaremos con la visita…

Primero, haremos un breve recorrido por la sección “antigua” de la base industrial. Ahora entiendo a qué se refieren: hornos del siglo XIX, con ladrillos/bloques de hormigón que las rodean. Muy de la vieja época :). Me hubiera gustado echar un vistazo más de cerca, pero hacía mucho calor cuando me asomé por las grietas de las “puertas” de ladrillo.

Me esperaba que hiciera calor, pero lo que no me esperaba era que no oliera mal. El lugar olía tan bien como una floristería (casi).

Estas son las gigantescas pinzas que extraen el vidrio óptico de los hornos:

¿Pueden adivinar cómo llaman a esta tina de arcilla?

Sí, ¡la llama bacinilla!

En la bacinilla es donde mezclan la arena, el cuarzo y otros ingredientes para derretirlos a miles de grados de temperatura (y no son grados Fahrenheit ni centígrados… puede que ni Kelvin. ¿Cuál es la diferencia? De todos modos, es mucho calor). La sustancia se funde, se agita y se mezcla, después se añade algo a la mezcla y lo dejan un rato más a alta temperatura. A una temperatura realmente alta, ¡literalmente más alta que la lava que sale del volcán Tolbachik!

Después de dejarlo hirviendo durante un rato, el vidrio fundido está listo para el siguiente paso: se convierte en cristal tal cual lo conocemos:

El equipo que fabrica este vidrio está listo. La plataforma horizontal carga la bacinica hacia ellos, lleno del derretido vidrio superpuro:

Primero, el equipo retira la piel/espuma, como si se tratara de leche o de sopa:

Dicha espuma se vierte en un contenedor en el que el equipo lo deja reposar: después de todo, se trata de una capa a 1,000 grados que se está enfriando.

Luego, vierten el vidrio derretido en un molde:

Sí, igual que en la cocina. Y yo que pensaba que la fabricación del vidrio de alta tecnología era diferente. Pues resulta que lo es…

Pero no del todo: al igual que las magdalenas, usan “copas” especiales para darle forma al producto.

Después de verter el vidrio derretido en el molde, uno de los especialistas de control de calidad debe comprobar su calidad:

Hoy, su veredicto fue positivo. Vaya. El largo proceso de elaboración del vidrio puede continuar…

Pero… ¿no sería mejor que las computadoras, los sensores y la automatización revisaran la calidad del mejor vidrio óptico del mundo? Esa fue la pregunta que le hice a nuestro guía y nos dijo que si se usan todas esas tecnologías, pero luego hablaré sobre ello…

Volviendo a la fabricación de cristal: después, el jefe dio la orden de cortar el cristal derretido por la mitad. Luego, los dejaron enfriar…

Por cierto, esta es la espuma que pusieron a enfriar:

Las siguientes fotos muestran las calderas en funcionamiento, pero sin las bacinicas (durante el servicio técnico, el cual, en realidad, se trata de algún tipo de arena contra incendios que lanzan en su interior). Pero la temperatura es tan alta que incluso la arena se hace líquida y debe removerse ocasionalmente (como la espuma de la “sopa”). Varias piezas del equipo industrial deben removerse para recibir servicio técnico ocasionalmente. Y no en balde: literalmente no existe nada que aguante el calor durante tanto tiempo.

De vuelta al tema de la falta de informática… Resulta que existen ciertos procesos en los que las computadoras no sirven; por ejemplo, la valoración de la pureza y calidad del cristal derretido cuando se encuentra de color naranja brillante, como lo muestran las fotos. Claro, algunas instalaciones de producción de vidrios ópticos usarán la automatización y robótica, pero en esta planta se elabora un cristal único, creado por especialistas y, por ello, no puede informatizarse la producción. Y eso es todo.

Pero continuemos con nuestra visita a la fábrica, cuyas fotos se vuelven más interesantes conforme avanzamos…

Aquí se almacena el producto final. En realidad no está terminado, está casi terminado. Bloques, hojas, pedazos de varias transparencias y colores. Un negocio de cristales:

Algunos de los productos que están casi terminados se procesan para elaborar productos de cristal, mientras que otros se utilizan para investigaciones en programas científicos y otros experimentos de universidades tecnológicas.

Los viejos hornos llevan en funcionamiento durante generaciones y suelen estar estandarizados en todo el mundo. Pero, algunas partes del equipo son muy especializadas y aquí podéis verlo, incluyendo las bacinicas y los agitadores. Por cierto, el cristal especializado lo fabrican japoneses, alemanes, americanos y lytkarinis.

Por desgracia, este no es un lugar muy turístico. Es un lugar de producción de cristal especializado. Aquí no hay mucho ruido ni mal olor. Aun así, la limpieza no atrae al turismo (aparte de a las personas que tienen un pasado matemático :).

Y seguimos avanzando… hacia la sección de procesado del cristal.

Una vez más, muy de la vieja escuela, literalmente muy soviético, recordando los años 60 y 70. Me quito el sombrero ante la ingeniería soviética, que todavía puede producir el cristal especial de hoy en día. De paso, aquí está el espejo de seis metros para el BTA-6.

Este espejo fue el más grande del mundo entre 1975 y 1993. El cristal de 40 toneladas se fabricó aquí; era tan grande que tuvieron que construir un nuevo edificio para albergar su producción.

Vaya, ¡miren qué grueso es! Cuando lo sacaron del molde, la única manera de no quebrarlo fue enfriarlo muy lentamente. Muuuuuy lentamente: ¡DURANTE DOS AÑOS! ¡Menos de un grado al día! ¡Luego lo pulieron durante 18 AÑOS! Con este torno.

No todas las piezas son gigantescas. También fabrican micropiezas, pulidas por robots:

Este equipo supermoderno es una pistola de iones que también pule vidrio. No se como funciona (si alguien lo sabe, que me lo diga, por favor…).

Bueno… adivinen qué es esto:

Se trata de…

Una torre de control de calidad. Una torre de titanio de 72 metros de alto en la que guardan un cristal supersuave y de alguna manera soplan a través de él para revisar la suavidad del espejo.

Pensarán que estoy impresionado por las instalaciones y así es… estoy muy impresionado. ¡Muy recomendable!