mayo 22, 2016
Una visita a Seúl
Casi nunca uso el metro, sin importar en qué parte del mundo esté. Mi rutina es: avión – coche – hotel (o casa) – coche – oficina – coche – hotel (o casa) – coche – avión… Sí utilizo los trenes que transportan a las personas entre las terminales de los aeropuertos, aunque los metros de las ciudades no.
Pero el otro día en Seúl alguien sugirió que diéramos una vuelta en metro. La estación más cercana estaba a unos 200 o 300 metros de nuestro hotel y pensamos “¿por qué no?”.
¿Qué puedo decir? Bueno, aunque ya sabía cómo funcionaba el tema porque por debajo de mi casa pasa el metro de Moscú, he de decir que el metro metropolitano de Seúl tiene algo. Es nuevo, moderno, limpio, organizado, cómodo y enorme. Aunque se abriera en 1974, es el doble de grande que el metro de Moscú y una vez y media más grande que el de Londres. Vaya, los coreanos sí que saben cavar.